Caña de azúcar

El aroma: dulce, comestible, asable. . . Sugar Cane de Demeter Fragrance Library captura tanto la dulzura como la frescura impresionante de la caña de azúcar pura recién cortada. Esta fragancia es tan inusual y ponible que la Fragrance Foundation otorgó a Demeter's Sugar Cane dos premios FiFi en 2001, uno a la Mejor Fragancia de Estados Unidos.

La historia: El cultivo de la caña de azúcar probablemente se originó en la isla de Nueva Guinea en el Pacífico Sur hace unos 8.000 años. En un relato polinesio sobre el origen de la humanidad, dos pescadores, el único pueblo del planeta, encontraron un trozo de caña en su red. Lo tiraron, pero después de atraparlo por casualidad durante tres días seguidos, lo plantaron en la tierra. Creció y al cabo de un rato estalló y de allí apareció una mujer. Cocinaba para los hombres durante el día y se escondía en la caña por la noche. No se explica cómo llegaron allí los dos hombres. La producción de azúcar a partir de caña es uno de los procesos tecnológicos más antiguos. Ya en el año 327 a. C., Alejandro Magno informó del cultivo de caña de azúcar en la India. En el año 700 d.C., los indios del subcontinente lo explotaban comercialmente. En aquella época, el azúcar se extraía de la caña masticándola y chupándola. Posteriormente se extraía el almíbar mediante prensado y cocción de la caña. Este proceso, que se practicó por primera vez en la India alrededor del año 300 d.C., se convirtió en la base para producir azúcar en forma sólida. En 1492, Colón transportó caña de azúcar desde las Islas Canarias a Santo Domingo. A medida que la caña se dispersó geográficamente, el costo de producción disminuyó, lo que provocó que el azúcar perdiera su estatus como artículo de lujo y aumentara su importancia como alimento básico.